La industria biotecnológica cambia todos los días para mejorar la pureza, el rendimiento y la recuperación de productos; además de hacerse más eficiente optimizando el uso de recursos y prácticas amigables con el medio ambiente. En este sentido, esta asignatura busca desarrollar un panorama general de las tendencias en bioseparaciones que deben ocurrir en el área de bioprocesos para seguir alcanzando estos retos que mejorarán el estilo y la calidad de vida.

El punto central de un proceso biotecnológico es el biorreactor, en el cual se utilizan catalizadores biológicos (microorganismos, enzimas, células vegetales o animales, virus) para la producción de metabolitos bioactivos de interés industrial. La recuperación del producto final requiere una serie de operaciones referidas colectivamente como “procesos downstream” o bioseparaciones. Estas operaciones comprenden todos los tratamientos que requiere el cultivo, una vez finalizado, para la obtención del producto biotecnológico sólido o líquido en las condiciones de pureza, calidad y actividad requeridas, listo para ser envasado y comercializado. Los procesos de bioseparación involucran operaciones de recuperación, concentración, purificación y acabado, entre las cuales se tienen: centrifugación, filtración, disrupción celular, precipitación, extracción líquido-líquido, adsorción, cromatografía, diálisis, electroforesis, ultrafiltración, cristalización y secado.